martes, 9 de febrero de 2016

El gran salto

"Porque sin ti esta vida carece de sentido, nunca lo tuvo, pero tú hacías que fuera un poco cuerda..
no puedo continuar viviendo en este mundo si no es contigo." Gritó desde el acantilado.

Entonces, ella saltó.

Saltó con la seguridad suficiente, esa seguridad en sí misma que nunca había tenido. Esa de la que carecía siempre menos cuando estaba con él.
Y al ritmo que caía, se sentía segura, sentía que estaba de nuevo en sus brazos.
Tenía una sonrisa sincera, la sonrisa más grande y real que había sentido nunca.
Sentía que en unos segundos volverían a estar juntos y ya nunca tendría que sufrir más, ni extrañarle, ni añorarle, solo sería felicidad a su lado, seguridad, amor, paz...

Entonces chocó contra las olas del mar, pero ella no murió en el acto.

Ella había muerto mucho antes, ella ya había muerto cuando vio a su gran amor palidecer como el frío hielo.

...

Ahora, nadie podría separarles.

Noches de insomnio


Soy una persona que le cuesta mucho dormir, desde pequeña, pero con los años va empeorando.
Intento pensar en algo y crear una pequeña historia en mi cabeza, no recuerdo cuando, pero leí que eso ayudaba a dormir.
Aún así, muchos días me dan las dos, tres e incluso cuatro de la mañana dando vueltas por la cama.

Y de vez en cuando, en algunas de estas horas perdidas se me ocurren temas para escribir, pero por mi mala cabeza los olvido o tan solo por pereza,  nunca llego a escribirlos.
En cambio, alguna vez se me ocurren pequeñas frases que describen a la perfección lo que siento en ese momento y esas siempre las recuerdo a la mañana siguiente.

Al ser frases sueltas, cada una de un día distinto, no completan un texto entero ni tienen cohesión entre ellas porque son inspiradas por personas, momentos o sentimientos distintos.
Aquí dejo algunas de ellas:

- Algún día te daré  todos los besos que planeé en mis noches en vela.
- Cada día me cuesta más dormir si no es pensando en ti.
- Tengo sueños, contigo y tengo sueño, pero temo no soñar contigo.
- Cada vez que te vea, anotaré todos los besos que debería darte.
- Acércate, no muerdo, a no ser que quieras.
- Hace frío, por qué no te quito la chaqueta.
- No se si lo sabrás pero tus labios encajarían perfectamente en los míos.
- Cupido o Eros, da igual, ¿podrías mejorar tu puntería? Gracias.
- Gracias a ti, por hacerme sentir. Gracias a mi, por hacerte reír.
- Aléjate de mi, tengo un muro contra ti, pero podría romperse si te quedas mucho tiempo.
- Podría haberme emborrachado y la resaca apenas habría durado, pero acabé enamorado con resaca de tus labios.
- Siento no poder decirte nada de lo que pienso, pero no confío en mis pensamientos.
- Necesito volar y alejarme de la realidad o de ti.


Gracias insomnio, las horas en vela han merecido la pena.